La experiencia me dicta que, salvo algunas cuestiones, los problemas que la vida nos pone por delante, se resuelven teniendo objetivos claros, esperanza de concretarlos, decisión en llevarlos adelante con estudio, dedicación, esfuerzo, sacrificio, trabajo y buena fe. En este caso, la resultante de estos valores ha sido la reapertura de la Cínica Oeste.
Atrás han quedado 6 años largos de lucha, con un arranque lleno de problemas que a medida que se resolvían algunos aumentaba la esperanza, pero que la aparición de nuevas dificultades, generaban nuevas incertidumbres que, gradualmente, fueron despejadas una tras otra, por un equipo de trabajo que puso todo para concretar esta reapertura.
Creo en primer lugar que la Clínica Oeste viene a cubrir una necesidad impostergable de la comunidad nuevejuliense y de la zona y que además se recupera un servicio de salud con mucha historia y prestigio.
Es un acto de justicia y un motivo de alegría, que el Dr. Raúl Potetti pueda ver a la Clínica Oeste reabierta y que seguramente desde otro lugar, el Dr. Ernesto Molina esté celebrando este acontecimiento.
También es un acto de justicia para mi amigo Daniel Molina, que estuvo todo este tiempo buscando las mejores soluciones junto al equipo de trabajo que se constituyó para librar esta batalla, Luis González, José Luis Martín, el Dr. Carlos Sgurudis, la inestimable colaboración de Marta Martín, y en lo personal la satisfacción de haber colaborado, más como amigo y convecino, para la concreción de este proyecto.
Se reabre un Centro de salud. Se recuperan puestos de trabajo.
Larga vida para la Clínica Oeste.
Dr. Juan José CAVALLARI